Hay un relato de Rudyard Kipling que cuenta a modo de cuento infantil o de fábula la domesticación de distintos animales por parte del hombre. El perro se convierte en su primer amigo, pero el gato es capaz de conservar su independencia. Porque el gato "... camina solo y no le importa estar aquí o allá, y si miras por la ventana de noche lo verás meneando su salvaje rabo y andando sin más compañía que su salvaje soledad..."
A mí, que he pasado años sin acercarme a un gato, ahora que los tengo bastante más cerca me están empezando a resultar fascinantes... por eso no me canso de dibujarlos...
4 comentarios:
Ruyard Kipling no tenía ni idea de gatos, pero tu dibujo sí.
Más gatos, más gatos¡¡¡
Gracias, guapetes! :)
¿Por qué el gato quería permanecer salvaje ?
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