A un lado el Palacio de Posada Herrera, de finales del siglo XVII y comienzos del XVIII, es una casona con torres en esquina, de cuerpo rectangular y tres pisos.
Al fondo el Torreón o Castillo de Llanes, se trata de una torre defensiva del siglo XIII, de planta circular, ubicada en la muralla medieval y custodiaba una de las puertas de entrada al recinto amurallado de Llanes. Sirvió como torre defensiva y más tarde de cárcel.
Al otro lado, la sidrería El Almacén para tomar buena sidra bien escanciada y buenas tapas en la terraza. Desde hace un tiempo los clientes escriben sus deseos en corchos de sidra y los meten en el muro de piedra, a modo de Pont des Arts.
Este rincón se convirtió en dibujo en una hoja del cuaderno, la hoja en postal y la postal en afecto. El afecto se dejó llevar, cruzó montañas, derribó fronteras, conoció un nuevo mar; el afecto se liberó. Y sí, la postal llegó a su destino.
1 comentario:
Bonita entrada. Conozco el lugar y con esa complicidad de alguna manera os robo un poco del afecto remitido.
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