viernes, 24 de septiembre de 2021

septiembre en mi diario del 96


Septiembre es un mes extraño al que le tengo especial cariño. Para muchos es un mes triste, porque supone la vuelta a la esclavitud; pero yo he preferido este mes para viajar o descansar, pues todos los demás ya se han ido. De todas formas sí, es extraño, siempre viene cargado de cierta nostalgia. Como si fuera la última oportunidad para ser felices. Como si, cargados con las maletas, nos diésemos cuenta de que nos vamos de un lugar maravilloso donde podríamos haber comenzado otra vida. Incluso si estamos en casa, algo nos dice que no acabamos de aprovechar ni el sitio ni el tiempo.

En 1996 usé un cuaderno de un enorme formato, difícil de llevar y sacar para dibujar. Más tarde entendería que los cuadernos más prácticos son los de bolsillo.

2 comentarios:

clara dijo...

Exquisita entrada y exquisito trabajo. Despedimos Septiembre, ese mes temido para alumnos y profes. Por primera vez lo he visto desde el balcón de mi año sabático y es bueno reconocerle la grandeza de ser un mes racional, en el que nos planteamos comenzar batallas nuevas, casi siempre en el mismo campo, y eso es difícil reinventarse. Cambios meteorológicos nos auguran que supondrán otro tipo de cambio, y eso es bueno, nos hace sentirnos más vivos. Me da igual en qué mes nos reencontremos, pero habrá que hacerlo. Septiembre nostálgico me hace añorar a muchas personas interesantes con las que quisiera asomarme al balcón y a los cambios que sean precisos.

josia dijo...

Como arriericos que somos, en el camino nos encontraremos. Un abrazo Clara.