Amo los árboles.
Son generosos con los demás seres.
Nos ofrecen cobijo, alimento, sombra. Purifican el aire. Crean mundos maravillosos donde viven entes fantásticos.
Puede que todos mantengamos un vínculo con los árboles porque nuestros ancestros vivieron en sus ramas protegidos de los peligros del suelo de las selvas, o porque bailaban a su alrededor cuando eran felices.
Los miro mientras paseo y los fotografío cuando no tengo tiempo de dibujarlos.
Procuro aprender sus nombres y en R3 los domingos por la mañana escucho hablar de ellos. Un día escuché que los árboles no tienen senetud. Crecen siempre. Mueren, sí, porque enferman o son destruidos por otros agentes, pero en su ciclo vital no existe el envejecimiento. Alucina!
Cupresácea
Pino piñonero
Ciprés
Melia en invierno
Plátano
Palmera en flor
7 comentarios:
Me gustan. Crecimientos vegetales estáticos en el paisaje cambiante, un hermoso reto para dibujar que dominas.
Preciosos dibujos, Esther. Amamos lo árboles, por eso escuchamos el musmo programa de radio. Besos
Bellísima entrada Esther. Yo, de mayor, quiero ser un viejo frondoso.
bonitos los dibujos y excelente la reflexión sobre los árboles....yo tambien los quiero.
Me gustan, tus dibujos y los árboles. No me canso de mirarlos en sus infinitas formas.
Comparto tu amor por los árboles, a mirarlos me relaja y sentarme debajo te trasmiten energía, y otras veces te relajan.
¡Arriba las ramas y la utopía! Cada día somos más los conmovidos que creemos que la utopía se puede hacer realidad si luchamos por ella.
#Ubuntu Comunidad del Bosque
Abrazote utópico, Irma.-
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