lunes, 4 de marzo de 2019

VIETNAM RAPIDE


Viajo por trabajo, cuatro días y tres noches, dos de ellas en vuelo o aeropuerto, seis aviones y un hotel ¡una ducha!
Amo el país, sí. Viví tres meses en Hanoi hace casi veinte años.
He trabajado codo a codo con ellas y con ellos, en andamios de hierro y bambú, por eso amo Vietnam.
Allí siempre se escuchan risas, esa es otra de las razones.


Me fui cargado con todo mi material Devuelteño, incluido mi pequeño cuaderno de color, por no perder la oportunidad pues una de mis espinas es que durante aquellos tres meses vividos yo sólo hacía fotografías; diapositivas para ser exactos. Me duele haber empezado tan tarde a viajar con cuaderno. De hecho entonces vine con el primero de mis cuadernos de viaje pero era para la evasión y tan sólo reflejé algún mínimo apunte de un país ¡tan gozosamente dibujable!


Primer viaje de planificación y únicos dibujos en el 2000.


Este último viaje me ha servido para aclarar algunas de mis ideas preconcebidas: pese a llevar soporte y material para color he seguido dibujando en mi cuaderno actual, ordinario, contable y con gama limitada y mínima. Este viaje me he liberado de la idea tirana de que hay destinos nobles, polícromos y vistosos frente a tiempos plebeyos; me he saltado discriminaciones (aunque sean por cariño) en favor del cuaderno como experiencia vital, se esté donde se esté, luzca como luzca, y me alegro.
No saqué ni usé el otro cuaderno con la carta amplia de color, no despliego ahora ante vosotros la cola del pavo real, sino la misma gama ratonera con que, desde hace un tiempo, retrato tanto pueblitos o palabras como museos, países o a mi padre.


Estas dos páginas de arriba corresponden a una larguísima espera (no fue la mayor, de doce horas) en un aeropuerto. Saltándome la ortodoxia Urban Sketcher, las compuse a partir de esas fotos que se hacen y nunca se usan para nada.
El cuaderno es tuyo y un medio de disfrute y aprendizaje, basta con que luego no publiques el resultado con los Urban Sketchers y lo hagas aquí, en De Vuelta con el Cuaderno, donde no hay decálogo sino una sola Ley: que sea en cuaderno.
Es un buen recurso para esperas prolongadas, eso sí: ya que te pones, no dibujes una fotografía tal cual. Monta, compón, asocia, combina, liga, une, juega y diviértete.


Frankfurt Airport front row. No hay pasarela de modelos como un aeropuerto internacional.


Este sí. Este tiene pedigrí Urban Sketcher. Terminal A, puerta 50, aún pintaba a la acuarela cuando se llevaron a esta "Reina de los Cielos" como la llamó un Sketcher norteamericano en Facebook que se dedicó al mantenimiento de "Sietecuatrosietes" y me honró con su felicitación. Disfruté, esa fue la clave, y se nota.

Un abrazo, De Vuelta.


10 comentarios:

Fernando Font de Gayà dijo...

El mas grande....!!!!

L.Frasco dijo...

Qué beleza!!! Páginas sublimes!

Unknown dijo...

Genial: sugerencias, opiniones, dibujos .....!!!!
Un abrazo.

Fusy dijo...

Por diversas causas, llevo un tiempo sin dibujar en el cuaderno y cada vez que veo/leo tus entradas, me doy cuenta que estoy perdiendo algo hermoso. Mil gracias Alfredo

josia dijo...

maravillosos recuerdos del Lago de la Espada Restituída y todo el movimiento alrededor. Buenos dibujos y un ánimo demasiado estético. Un cariñosos saludo

PepaTorres dijo...

Gracias, siempre se aprende contigo, y esa humildad o falta de presunción en el trazo y en el color aún los hace más bonitos.besos.

Inmaculada Martin dijo...

que bonitos dibujos y que explicaciones tan acertadas. un abrazo.

Marisa Ortun dijo...

Gozosamente dibujable !! Nada de lo tuyo es ordinario. Me gustan los heterodoxos. !Cómo sabes compartir sensaciones y experiencias!.

clara dijo...

Maravilloso, vuelvo a rendirme a tus pies. Exquisito.

clara dijo...

Se siente como respiras en el cuaderno. Os tenéis dominados el uno al otro, y eso es precioso de ver como espectadora, vouyeuse. Envidiable esa relación tan apasionante.