El Gran cuaderno Compartido ya tiene otra doble página más rellenada. Fue toda una experiencia enfrentarme al abismo de semejante cuadernazo y de la impresión de compartir cubierta (uuuyyy como suena esto....) con la Grandísima Inma. La verdad es que el papel lo puso fácil, es muy especial y agradecido. Luego para el tamaño que tiene no pesa apenas.
Y en Orés tuvo que ser, que parece que ahí me relajo y garabateo a mis anchas.
A ver quién es el siguiente. Ya tengo ganas de verlo lleno de dibujos de todos. Luego hasta que se le encuentre un sitio habrá que pasearlo como antes se llevaban unas capillas de vírgenes y santos de casa en casa...¡¿cómo se llamaba eso?!.
Y en Orés tuvo que ser, que parece que ahí me relajo y garabateo a mis anchas.
A ver quién es el siguiente. Ya tengo ganas de verlo lleno de dibujos de todos. Luego hasta que se le encuentre un sitio habrá que pasearlo como antes se llevaban unas capillas de vírgenes y santos de casa en casa...¡¿cómo se llamaba eso?!.
2 comentarios:
Ese árbol en flor, que aparece en la anterior entrada, ocupa, como debe ser, el centro de la composición.
¡Al natural es espectacular! joyita de cuaderno y de obras.
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