domingo, 3 de noviembre de 2013
Modernos "rickshaws"
Un río de turistas italoparlantes avanza desde el puerto; un gran barco ha debido de descargar su pasaje. "il duomo" "passeggiata" "centro storico" distingo entre otras expresiones. Interceptando su paso, una batería de bicitaxis aguardan para hacer su agosto. Recuerdo las pelis de mi infancia, en las que rickshaws orientales trasladaban a extranjeros entre el gentío a través de ciudades exóticas; es curioso ver la idea actualizada. Me maravilla la capacidad de los conductores (¿se llaman así?) para adivinar la nacionalidad del posible cliente de un solo golpe de vista, para después interpelarles en su idioma.
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5 comentarios:
Tu si que has interpelado en su idioma este rincón de la calle de Santa María
¡Qué bueno!
Tremendo, Luis, después de tanto tiempo aún consigues sorprenderme :)
Me gusta el carrico con la bicicleta. ¡Bien¡¡
Qué placer volver del supremo encuentro en Tánger y encontrar esta delicia recibiéndonos. Te echamos de menos: tu persona, tu dibujo y tu carisma. Espero que estemos de vuelta con el cuaderno en pronta ocasión. Si no la hay, nos la dibujamos.
¡Qué bueno eres!
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