Croacia es mucho más que Dubrovnik, Split y la Dalmacia. La
desconocida Istria nada tiene que envidiar a la Toscana italiana. Quizá no
tenga su ordenado diseño renacentista, pero es más agreste, más boscosa y la
piedra medieval de sus pueblos es tan auténtica como sus gentes. Un paisaje que
reconcilia con nuestra condición humana, que permite seguir creyendo en nuestra
capacidad para convivir con la naturaleza sumando, creando, respetando…
Maravillosa Istria. Merece una prolongada estancia; algo más que unas apresuradas
horas hacia un aeropuerto y una sola cerveza local.
8 comentarios:
¡Ah! Y un precioso encuentro con un cuadernista alemán ¡somos legión! ;-)
Me encanta el ciprés entre las dos hojas del cuaderno que se termina inclinando a la derecha , como empujado por la música que entra en la ciudad.
Esta parte me la dejé para el siguiente viaje, me alegra saber que es de su agrado, caballero
Ohhhh!!!! Mas! Mas! Mas!
¡Se me acabó el viaje! Y era por trabajo. Toma nota Cristina de estos dos pueblos y de Umag, Pula, los vinos blancos de malvazija, los tintos de teran, el archipiélago de las Brijuni... Maravillosa Istria.
Un abrazo a todos.
Pss ¡¡ Pss ¡¡ cuando vuelvas por allí, avísame que nos vamos juntos, ¡¡ abusón ¡¡ jejejejjejeje
¡Qué arte el tuyo!, y de trabajo... estás tocado por los dioses, lo tuyo es sobrenatural.
Aprecio muito essas imagens (desenhos e caligrafia), assim como informações de história e de pedras de armas, indicando os brasões. Obrigada pelas preciosas indicações.
Publicar un comentario