Entre Lisboa y Barajas, siempre pasa algo - una maleta que sigue por dónde no vas, una maleta que no sigue adonde vas, un vuelo que se retrasa, una tripulación que no se sabe dónde está. Un cuaderno es un buen antídoto para las esperas - las calendarizadas y las que llegan sin ser anunciadas.
4 comentarios:
¡Cuánto Portugués por el blog!. ¡Que gusto y satisfacción, ver esta "hermandad de pueblos!. ¡Aupa Lisboa!.
Pef, me gusta muchísimo tu trabajo. Se que en directo me va a gustar todavía más. Me disculparás si en Teruel me emociono al verte dibujar en directo, y desvelarnos tus modos y maneras.
Cuantos acontecimientos durante los viajes...
qué estupendos..!
Muchas gracias. Los modelos de aeropuerto son muy cooperativos - la gente está tan aburrida que poco se mueve.
Y en un mes e medio: ¡Teruel!
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